Diamante no escapa a la grave situación que se presenta a raíz del factor climático. Las copiosas lluvias que asolaron durante las últimas semanas arrojan como resultado un panorama crítico para la zona de barrancas que afecta directamente a los pobladores del lugar.
Días pasados, el Intendente, Prof. Lénico Aranda,
recorrió junto a funcionarios la zona afectada para realizar un relevamiento del
estado en que se encuentran las viviendas y ofrecer contención a las familias
damnificadas que están ubicadas en la zona de desprendimientos.
La barranca cedió unos cinco metros hacia el lado del
centro y el movimiento de los suelos fue producto del exceso de lluvias. A raíz
de esto se vieron perjudicados los barrios Puerto Nuevo, Puerto Viejo, 23 de
Septiembre y Barrio Urquiza.
Ante el acercamiento de los vecinos al municipio,
puntualmente a la Dirección de Desarrollo Social, con el objetivo de solicitar
ayuda, la Asistente Social Mariana Zapata y el Encargado de Comisiones Vecinales
Gustavo Cerrudo efectuaron un recorrido este miércoles por la zona de Puerto
Viejo para constatar los problemas que se generaron con el temporal. Los mismos
pudieron verificar que los vecinos residen en viviendas con chapas rotas, que en
muchos casos faltan cargas en los techos y tienen paredes partidas, etcétera. En
el marco de esta situación precaria y frente a las innumerables lluvias, las
viviendas se vuelven vulnerables, acrecentando el malestar, e incluso se
presenta el movimiento de suelos en esta zona de la ciudad.
Es necesario destacar que desde el
Municipio se están tomando las medidas necesarias para paliar la situación y
brindar apoyo a quienes están atravesando tan crítica circunstancia.